"Siempre que vuelves a casa, me pillas en la cocina, embadurnada de harina, con las manos en la masa... ¡Niña! (hei, esto es cosecha propia, je je), no quiero platos finos, vengo del trabajo y no me apetece pato chino. A ver si me aliñas, un gazpacho con su ajo y su pepino (o copita de Ojén).Todos: Papas con arroz, bonito con tomate, cochinillo, caldereta, migas con chocolate, cebolleta en vinagreta, morteruelo, lacón con grelos, bacalao al pil pil y un poquito’e perejil.
—¡Chiquillo! (hei) que yo hice un cursillo para cordon bleu. —Eso ya lo sé pero, ¡chiquilla!—¿Qué?—Dame pepinillos y yo los remojaré con una copita’e Jerez..."
No me digáis que esta canción no incita a ponerse a cocinar como locos, aunque no nos guste, o por lo menos a hacer algún experimento, que no tiene porque salir siempre bien. Pues sí, esto es lo que me pasó a mi ayer, que mi ilusión de hacer un bizcocho esponjoso, se quedó en un bizcocho mármol, que ni mi novio quiso para desayunar, eso sí, haciéndose el despistado. Cuando le recordé que el bizcocho estaba en el horno, me dice: -"ay cari, ya eché los cereales en la leche, me he olvidado de tu rico postre, lo siento..", ya ya , como que una se chupa el dedo, pues que sepas que no ha colado.
Vale, que ya sé que mi pasión por la cocina realmente es casi inexistente, pero de vez en cuando, a una le apetece hacer algo especial. Tengo que reconocer que la receta siempre me la acaba facilitando mi madre o mi amiga Maru, pero el fin justifica los medios en este caso, ¿no?.
En fin, creo que tardaré mucho tiempo en hacer otro postre, y si os pido alguna receta, la próxima vez será de algo más light, ya que ahora me estoy comiendo el bizcocho yo solita y esto muy rentable para mi body no puede ser.
Biquiños golosos para todos.
7 comentarios:
Acabo de descubrir que me faltaba un ingrediente para mi bizcocho:la levadura en polvo!
Bueno, nadie es culpable en este caso y yo me siento un pelín mejor, ya que la próxima vez seguro que me saldrá bien, je je.
Ja, ja, ja...
muy bueno lo de "uy! Me he olvidado!"
La próxima vez le preparas el desayuno y le pones el cachito de bizcocho al lado de la taza y ya no se puede hacer el despistado.
Aunque un bizcocho sin levadura, no sé, no sé... como que entiendo que tu D escurrise el bulto.
Yo tengo una receta de tarta de Santiago que es fácil, sale siempre (o casi siempre) perfecta, no necesita levadura, y es un éxito con los alemanes.
Cuando la quieras te la facilito. Y oye, quedas como una reina en Galicia diciendo que haces tarta de Santiago, no hay mucha gente que la haga...
Besitos y buen finde. Nosotros (los tres) nos vamos a Viena a celabrar el aniversario.
¿No era una copita de Ojén? Es que yo era muy fan de este programa...
MEA CULPA. Dilo sin miedo, Di. Me olvidé de incluir la levadura entre los ingredientes...aunque eso es del ABC de la repostería, eh?? jaja. La próxima vez seguro que sale bien. Tú no desistas.
pixaaaaaaaaa... !!! que hambre que me está entrando, DIOS!!!! Di, no te imagino cocinando, I´m sorry!!! jajaja
Yo voluntad, voluntad para la cocina, no tengo la verdad, no me gusta NO, NI UN POCO, aunque que conste que lo poco que hago está RICO, RICO!!!
jajaja
LA K
Mira DI,
que una no puede ser perfecta, que no podemos ser guapas, inteligentes, simpáticas, amorosas, chicas de hoy en día y encima hacer buenos bizcochos de buenas a primeras.
Este arte se aprende poco a poco. Yo en este año sabático que llevo me he convertido en una ama de casa consumada. Con la pastelería fina no me he atrevido aún, pero he perfeccionado la técnica de la cocina a niveles insospechados.De aquí a poco, cuando el bizcocho nos salga, seremos unas auténticas "joyicas".
Pues sí, yo también pensaba que la letra incluye una copita de Ojén!, pero como tenía mis dudas, me fié de internet, jeje, pero lo incluimos, no pasa nada.
Y creo que en lugar de cochinillo decía cochifrito si no me equivoco...bueno, que no quiero ser tocacojones, jiji
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