Este fin de semana, la subida de las temperaturas (una media de 8º) y varios planes rompieron el cascarón de la pereza que me resguardó del frío de noviembre.
Cierto es que soy una persona a la que le gusta salir (creo que no descubro nigún secreto) y que después de un mes prácticamente de clausura en nuestra casa los viernes y sábados por la noche, necesitaba ya soltarme un poco la melena. Y la verdad es que salimos, y lo hicimos por la puerta grande, como en los viejos tiempos.
Uno de esos planes que comentaba al principio fue un concierto de jazz el viernes. El grupo que tocaba era de un compañero de trabajo de David y la verdad es que nos encantó. Además, no éramos demasiada gente y el bar era muy acogedor, por lo que fue prácticamente como un concierto privado para familiares y amigos.
El otro plan paralelo de la noche fue la despedida de M, un amigo sevillano que se vuelve hoy para España. Cuando salimos del concierto, nos reunimos con él y sus compis de trabajo en uno de nuestros locales favoritos de Reeperbahn, corazón de la marcha en Hamburgo y que está a cinco minutos de nuestra casa (queda prometida una entrada sobre este barrio). La verdad es que estuvimos allí varias horas y nos lo pasamos muy bien. Además, éramos un grupo numeroso formado, aproxiamdamente, por cinco alemanes, 10 españoles y nuestro amigo el salvadoreño, que por cierto no perdió oportunidad para conocer a alguna de las españolas (sólo hablar, no seáis mal pensados).
La noche duró hasta altas horas y lo mejor de todo es que nos lo pasamos muy bien. Pero el cuerpo las hace y el cuerpo las paga. Así que el sábado estábamos hechos polvo, pero eso no evitó que por la noche quedásemos ya en plan más tranquilo con M y otros amigos para cenar. Eso sí, de postre la mayoría pedimos nuestra camita para dormir hasta el día siguiente. Y es que ya no somos lo que éramos. Bueno, D dice que él estaba al 100%, ejem.
¡Un biquiño M y buen viaje!
Auf Wiedersehen!
Cierto es que soy una persona a la que le gusta salir (creo que no descubro nigún secreto) y que después de un mes prácticamente de clausura en nuestra casa los viernes y sábados por la noche, necesitaba ya soltarme un poco la melena. Y la verdad es que salimos, y lo hicimos por la puerta grande, como en los viejos tiempos.
Uno de esos planes que comentaba al principio fue un concierto de jazz el viernes. El grupo que tocaba era de un compañero de trabajo de David y la verdad es que nos encantó. Además, no éramos demasiada gente y el bar era muy acogedor, por lo que fue prácticamente como un concierto privado para familiares y amigos.
El otro plan paralelo de la noche fue la despedida de M, un amigo sevillano que se vuelve hoy para España. Cuando salimos del concierto, nos reunimos con él y sus compis de trabajo en uno de nuestros locales favoritos de Reeperbahn, corazón de la marcha en Hamburgo y que está a cinco minutos de nuestra casa (queda prometida una entrada sobre este barrio). La verdad es que estuvimos allí varias horas y nos lo pasamos muy bien. Además, éramos un grupo numeroso formado, aproxiamdamente, por cinco alemanes, 10 españoles y nuestro amigo el salvadoreño, que por cierto no perdió oportunidad para conocer a alguna de las españolas (sólo hablar, no seáis mal pensados).
La noche duró hasta altas horas y lo mejor de todo es que nos lo pasamos muy bien. Pero el cuerpo las hace y el cuerpo las paga. Así que el sábado estábamos hechos polvo, pero eso no evitó que por la noche quedásemos ya en plan más tranquilo con M y otros amigos para cenar. Eso sí, de postre la mayoría pedimos nuestra camita para dormir hasta el día siguiente. Y es que ya no somos lo que éramos. Bueno, D dice que él estaba al 100%, ejem.
¡Un biquiño M y buen viaje!
Auf Wiedersehen!
8 comentarios:
Yo no pedí la cama, sino un Jim Beam on the rocks. Y después de esto, estaba, efectivamente, al 100%. Pero también pq yo soy más de fondo (tipo Indurain), mientras que Andu es más explosiva, así que no regula y tiene que abandonar tras las primeras etapas (tipo el Chava).
Estoy en plena forma!!
Jeje...luego dicen que la fiesta sólo está en España!!! :-D
Yo ya he salido demasiado en mi vida, ahora estoy un poco en plan recogimiento ;)
Besos
Yo creo que el cuerpo se acostumbra a lo que lo acostumbres. Yo tengo época de salir mucho (y cuanto más salgo más quiero) y otra de no salir nada (y cuanto menos salgo menos me apetece)
Pero me adapto rápido...y yo también soy más del tipo explosivo...la renia de la fiesta hasta que me da el bajón y mi cuerpo empieza a pedir cama...
puf, mi última salida en plan grande fue en agosto para nuestra despedida de solteros. Habitualmente mi hora de irme a la cama los viernes y los sábados suele ser las 11.30, rara es la noche que llego a las 12.
Aquí todavía no tenemos formado un grupo de amigos y además en Oak Ridge no hay bares, en serio. No hay bares, ni pubs ni nada de eso, hay que irse a Knoxville, a unos 30-40km, así que recogimiento total.
Uffff...
Es que a mi, me ha llegado el viejazo de un paraguazo...
Mi último descalabro con zangoloteo y todo (les traduzco: zangoloteo vendría siendo en buen chileno harto movimiento, baile,risa, conversa y de vez en cuando, una afirmadita en la silla porque se me movia el suelo...) fue por septiembre, para las fiestas patrias....
El sábado pasado me junté con amigos, un rico asado, y partimos bebiendo cervecita, luego un par de combinados de pisco con coca cola (en realidad, fueron un cuarteto, no un par), después del asadito vinieron los bajativos de.. ejem... vodka naranja, ron de coco y un cigarrito de esos que "relajan" y yo, nada... volví a mi casa con ganas de más...
Pero como nadie quería "más" pues no me quedó otra que meterme en la cama y terminar la fiestita en un sueño!!!
Al menos al día siguiente dormí hasta muy tarde...
Lo curioso es que no tenía jaqueca ni esa sensación típica después de un carrete...
Será que mi cuerpo se acostumbró? O será que mis salidas ya no son como antes?
Podía bailar 3 ó 4 horas seguidas, beber un litro de cerveza yo solita, fumarme una cajetilla de cigarrillos en dos horas, y seguir con ganas de más al acabar la fiesta. Ahora me conformo con reunión en casa de amigos, con una entretenida conversación alrededor de la mesa, recordando anécdotas, mirando fotografías y videos, ven? me llegó el viejazo y aún no tengo 30 años!!!! Si sólo hay bebidas, pues sólo se toma bebida, y si sólo hay juguitos naturales, pues vamos! que el zumo de naranja es pura vitamina (aunque con un poquito de maldad sabe muuucho mejor)
Qué depresión!!!
Yo creo que la fiesta está dónde estén los espñoles.... somos capaces de montar una fiesta hasta en Marte... Y yo creo que lo general es ser más como el Chava que como Indurain!!!!
Un besin
Eu son Chava total! ou mellor dito era porque fai como uns 3 anos que solo salo unha media de 5 verces ó ano. Salir, me refiro en plan festa rachada porque o resto dos días toca cine, cena en casa.... Non voto de menos o de sair de "farra" porque as últimas veces que o fixen paseino sen pena nin gloria. A xente non é a mesma de antes, os locales cambiaron, a música tamén... agora o corpo pídeme relax, debe de ser porque dos 15 ós 24 vivín no mundo de CHAVALADIA ji.
Que conste que fai como 4 meses que non saio de festa e xa vou tendo ganas, así que terei que ir decidíndome je. Bikiños
Ahora con la peque salimos aún menos... la última vez que salí de fiesta fue en la boda de unos amigos y la verdad que aguanté el tipo como una campeona, aunque al día siguiente estaba deshecha.
Publicar un comentario